Zano (ZANO/USDT) muestra una renovada fortaleza en el gráfico semanal, subiendo más del 21 % en la última semana para cotizar cerca de $16.50, su nivel más alto desde junio. Tras meses de consolidación lateral, este proyecto blockchain enfocado en la privacidad parece estar al borde de una ruptura significativa, una que podría redefinir su estructura de mercado a medio plazo de cara a 2026.
Configuración técnica: El triángulo ascendente apunta a un potencial de ruptura
El gráfico muestra a Zano manteniendo un patrón de triángulo ascendente bien definido, marcado por una serie de mínimos más altos que convergen hacia una resistencia a largo plazo en $17.77. Esta configuración, a menudo asociada con la acumulación previa a la continuación, refleja una creciente presión alcista.
Un cierre semanal decisivo por encima de $17.80 podría confirmar este patrón, señalando el inicio de una nueva fase de tendencia alcista con objetivos inmediatos en torno a $22.50 y potencialmente $24.80, las siguientes zonas clave de resistencia basadas en Fibonacci.
Sin embargo, si Zano no logra mantenerse por encima de $16, los operadores a corto plazo deberían estar atentos a un posible retesteo de la zona de soporte entre $12.50 y $13, que ha servido como un fuerte rango de acumulación desde agosto. La línea de tendencia blanca ascendente en el gráfico subraya la fortaleza de ese nivel como soporte estructural.
Los indicadores de momentum están alineados con la estructura alcista. El RSI se sitúa en 63.5, con tendencia ascendente pero aún cómodamente por debajo del territorio de sobrecompra, lo que sugiere un potencial alcista continuo sin riesgo inmediato de agotamiento.
Mientras tanto, el indicador On-Balance Volume (OBV) continúa subiendo de manera constante, una señal de interés comprador sostenido incluso durante las fases de consolidación. Históricamente, tales divergencias de OBV en proyectos como Zano han precedido movimientos impulsivos importantes.
Si el impulso alcista persiste y el volumen se expande por encima de la resistencia de $17.80, Zano podría entrar en una nueva fase de descubrimiento de precios. Una ruptura confirmada marcaría el primer cierre semanal por encima de la resistencia desde abril de 2025, convirtiendo la zona en un fuerte soporte.
Hasta entonces, los operadores estarán atentos a velas de confirmación y a un crecimiento sostenido del volumen. El rango de $13–$14 sigue siendo la línea crítica que los alcistas deben defender.
¿Qué hace diferente a Zano?
Zano es una blockchain de capa 1 construida para activos confidenciales. A diferencia de las monedas de privacidad tradicionales que solo ocultan direcciones de billetera o montos, el protocolo de Zano permite a los usuarios emitir tokens y construir dApps con privacidad integrada en la capa base.
El cofundador de Zano, Andrey Sabelnikov, fue el desarrollador principal de CryptoNote, el mismo protocolo base detrás de Monero y otras monedas de privacidad.
Técnicamente, Zano utiliza firmas de anillo, direcciones ocultas y Bulletproofs+ para ocultar remitentes, destinatarios y valores. También integra un mecanismo llamado “Zarcanum” que mantiene en privado los montos en staking, algo que ni siquiera la mayoría de las redes de privacidad logran.
Más allá de las transferencias simples, los usuarios pueden interactuar mediante alias, contratos de depósito en garantía y una API de mercado descentralizado, creando la base para un ecosistema donde la privacidad es nativa, no opcional.
Las monedas de privacidad recuperan protagonismo mientras los operadores giran hacia el anonimato
Tras un año dominado por los flujos de entrada en ETF, el arbitraje institucional y la constante financiarización de los mercados cripto, el sector de las monedas de privacidad está preparando silenciosamente su regreso. Tokens como Zano, Monero y Zcash están atrayendo una renovada atención mientras operadores y desarrolladores buscan rincones del mercado que aún sean fieles a los principios originales de las criptomonedas: autocustodia, soberanía y discreción.
La rotación no es solo especulativa. Los datos on-chain muestran un aumento en el número de transacciones en redes protegidas y una recuperación de la liquidez en exchanges descentralizados que soportan swaps con privacidad.
Estas tendencias sugieren que la narrativa de la privacidad, durante mucho tiempo eclipsada por el escrutinio regulatorio y las exclusiones de listados, está evolucionando de un activismo de nicho a un segmento legítimo del mercado. A medida que el cripto mainstream converge con las finanzas tradicionales, los inversores parecen cada vez más dispuestos a tratar el anonimato como una característica, no como un defecto.
Este cambio refleja algo más que nostalgia por las raíces cypherpunk de las criptomonedas. También es una respuesta práctica a los crecientes requisitos de cumplimiento y a la infraestructura de vigilancia que rodea a las plataformas centralizadas. Para muchos, poseer o transaccionar con activos de privacidad representa una cobertura contra la sobrerregulación, una forma de preservar la opcionalidad en una industria que alguna vez prometió libertad por diseño. Con el uso de la red en aumento y la liquidez regresando a mercados antes inactivos, las monedas de privacidad empiezan a parecer menos reliquias de una era anterior y más una infraestructura esencial para la próxima fase de las finanzas descentralizadas.
